martes, abril 05, 2016

Mago: La Ascensión Edición 20° Aniversario

                Es difícil hacer una reseña de un libro de aniversario sin considerar algo de su historia, principalmente porque el mismo público objetivo de este libro es gente que ya lo conoce de sus ediciones anteriores, y explícitamente es "una carta de amor para los fans". Así que comenzaré con algo de mi propia historia con Mago: La Ascensión.

                Un poco de historia
                Conocí Mago el año 98. En esa época consideraba Vampiro: La Mascarada como el juego de la vida, con ese dilema moral de ser malo y no poder evitarlo, o tener que matar para sobrevivir, mezclado con el tema político del juego. Tampoco es que conociera mucho más, ya que lo que se conseguía en esos momentos era escaso, y mi experiencia era, entonces, limitada a mundos fantásticos (ya sea en el pasado o en el futuro) y a alguno que otro juego de terror, pero que dentro de todo eran medios genéricos. Un juego con "metaplot" era una novedad.
                Avanzando en la historia, ese año mis papás viajaron por primera vez a Estados Unidos, y aproveché de hacerles un encargo. Les pedí un suplemento para Vampiro (obviamente), que si la memoria no me falla, fue la guía del Sabbat. Quería antagonistas para mis historias, y como soy un poco obsesivo, la pequeña descripción del manual básico no era suficiente como para animarme a meterlos en mis crónicas, pues no quería representarlos mal. En caso que no lo encontraran, les pedí Mago. Había escuchado del juego hace unos meses, cuando me llegó una lista de libros que un grupo de muchachos podía importar por fuera de las tiendas (que no traían mucho, como ya dije). En ese momento, recuerdo que con algunos amigos nos reímos un poco, pensando en cuál sería la gracia de interpretar a un mago. Claro, mi percepción era que los conjuros se agotarían, que no tendrían maná o puntos de magia, y que su motivación sería quedarse en su casa y aprender alquimia…
                El caso es que Mago era mi segunda opción. Si no podía tener al Sabbat de antagonistas, necesitaba a otro grupo, y un amigo ya tenía Hombre Lobo (y no me llamaba mucho la atención su descripción y la sensación básica de máquinas de matar que parecían ser), por lo que parecía la mejor alternativa. Además tendría un juego que nadie más tenía por ese entonces en mi ciudad (y que por cierto, se demoró bastante en aparecer, pues no muchos eran dados a leer en inglés).
                Cuando mis papás volvieron y me dieron el juego, no puedo negar que fue un poco una decepción. Sin embargo, era mi nuevo juego y me dispuse a leerlo. Me tomó un buen tiempo, pues era el primer juego de rol que leía completo en inglés, y lo hice con el diccionario todo el tiempo en el velador. La lectura era lenta, pero valía la pena. El libro me estaba abriendo la mente, y cambiando mi percepción respecto a qué consideraba un buen juego de rol (además de, creo, ser un pilar en mi avance en el inglés, algo que hasta el día de hoy me sirve).
                Cuando terminé de leer, quedé impresionado. Lo que pensé que sería una lata de personajes sin motivación, se convirtió en mi juego preferido. Dejé Vampiro completamente de lado, y su angustia adolescente y conflicto moral fabricado me pareció básico e irrelevante. En Mago, el conflicto es por la realidad, por la sobrevivencia, pero no propia, sino de la magia. Lo más bonito es que hacer magia no es cualquier cosa, es alterar la realidad, y cualquiera tiene el potencial de hacerlo.
                Creo que el concepto que más me agradó fue el de la realidad consensual. Súmenle a eso personajes que no están obligados por "el destino" o quién los mordió a ser de algún grupo o tener ciertas características, que las posibilidades de historias son infinitas y que lo bueno y lo malos es absolutamente relativo, y claramente tenemos un juego de rol muy difícil de igualar. No puedo dejar de mencionar su sistema de magia, en el que no importa realmente cuántos puntos tenga un personaje en alguna habilidad mágica, si no puede justificar en su paradigma algún efecto, no puede realizarlo (y al revés también, no es cosas de dar una buena justificación y ya, y eso me costó innumerables discusiones en el pasado).

                20 años no es nada
                ¿Qué es la Edición de Vigésimo Aniversario de Mago: La Ascensión? Es un libro que agrupa "todo" lo necesario para jugar, que actualiza los conceptos y la historia a los más de 10 años que han pasado desde el último libro publicado en el mundo de tiniebla (algo bastante importante en un juego donde la Tecnocracia tiene tecnología de punta), pero que no nos mete un metaplot que hay que seguir para estar al día. Es, en teoría, el único libro que habría que tener para poder narrar una crónica de Mago. ¿Lo es, definitivamente?
                Este libro es un mastodonte de casi 700 páginas. No he podido ver la edición física aún, puesto que estoy esperando por la edición de lujo que compré, y no he pedido la Print on Demand. Sin embargo, creo que decir que el manual básico de a segunda edición tenía poco más de 300 páginas, la Guía a la Tecnocracia unas 250 y el Libro de la Locura menos de 150 puede dar una idea de la cantidad de información que hay en este libro.
                El libro es a todo color, con un diseño que mezcla la estética de las tres ediciones anteriores (aunque creo que Segunda Edición es la que más aporta en ese aspecto), y con algunos dibujos que se repiten el plato (algunos incluso en versiones a color que no habían sido publicadas anteriormente). Respeta la estructura clásica de los libros básicos del Mundo de Tinieblas, con (si no me equivoco), los mismos capítulos. Eso significa que tenemos una parte inicial dedicada solo a ambientación, luego una parte de reglas básicas, y después consejos y profundización en cosas específicas de las reglas y la creación del drama del juego. Aprovecho de aclarar acá que no se incluye nada específicamente relacionado a Mago: La Cruzada, además de los temas históricos. El juego es Ascensión, no un recopilatorio de todo Mago.
                La primera parte es, obviamente, la más interesante de leer y la más sustanciosa. Es interesante ver como el libro entra en detalle en la cosmología de Mago como ningún otro libro básico lo había hecho antes. Si en segunda edición la Umbra abarcaba unas 25 páginas, acá son 100. Es, definitivamente, suficiente para poder narrar una crónica en la Umbra, o al menos para incorporarla plenamente, cosas que no puedo decir de ediciones anteriores. Sí, hay cosas que quedan fuera y referencia a algunos de los suplementos anteriores, pero es netamente para complementar o ahondar en el tema, para nada algo necesario (como sí lo era antes si uno quería incluir eso).
                La historia de la magia y quienes la practican me pareció que no se tocó en profundidad, pero tampoco fue así en otras ediciones. Sí, entrega lo suficiente para conocer, hacerse una idea de las facciones y jugar sin problemas, pero quedan detalles fuera, y algunos suplementos anteriores han ahondando más. Sin embargo, no es algo crucial para un juego contemporáneo, y el espacio es limitado. Un cambio importante al respecto es que ya no tenemos la visión de un lado o de otro, sino que algo mucho más general sobre la magia. Este es el primer libro en el que se trata a todos los grupos como posibles PJs, y como tal, como "los buenos", solo que con diferentes visiones. Un tremendo avance.
                Esta parte también destaca frente a otras ediciones por la no inclusión de un metaplot impuesto a los jugadores, sino que se usan cuadros con información adicional de cómo se consideraba en las ediciones anteriores, y las posibles opciones del narrador ahora, junto con lo que eso implicaría. Todo opcional.
                Como comenté, esta edición no se centra solo en las tradiciones, por lo que en la creación de personajes hay información también de la Tecnocracia y de los Dispares, grupos de magos no afiliados a ninguno de las dos grandes facciones (y que aparecieron antes en diversos suplementos). Antes de tener el libro, pensé que habría más información sobre cada una de las tradiciones (como por ejemplo en los suplementos El Libro de las Sombras, con 6 páginas para los Al-i-batin), pero mantuvieron sus 2 páginas cada uno. Debo decir que ese pareció poco. No sé si es suficiente para comprender el paradigma y la historia del grupo, y mi propia experiencia al respecto está teñida de toda la información que he recabado en más de 15 años, mucha de la cual conseguí en Internet en su momento. No me malinterpreten, ninguna de las ediciones anteriores es mejor en este aspecto, simplemente no sé si para un jugador novato es suficiente. Aprovecho de mencionar que cada facción (Tradiciones, Tecnocracia y Dispares) tiene una introducción que nos cuenta algo más de sus motivaciones, su historia y sus prácticas, antes de entrar de lleno en sus sub-grupos. También los Nephandi y los Merodeadores obtienen su apartado (aunque no pensados para jugar con ellos).
                Creo que lo que más me gustó de acá fue la inclusión de los Dispares, pues no lo esperaba, y da una alternativa nueva y distinta de juego. No están todos los grupos originalmente mencionados en otros suplementos, pero sí hay bastantes para generar variedad. Como comenté, 2 páginas creo que no alcanzan para decirlo todo, y una de las cosas que quedó fuera fue la organización interna de cada grupo, que si estaba mencionado en la Edición Revisada. Originalmente iba a ir incluida en el libro, pero tuvo que ser cortado y aparecerá en un futuro suplemento en desarrollo (The Book od Secrets, parte del Kickstarter por esta edición).
                El apartado de reglas es muy parecido al de las ediciones anteriores. No hay cambios mayúsculos de reglas. Se han revisado algunas habilidades y actualizado para quedar a la par con las otras versiones de aniversario del Mundo de Tinieblas, pero no hay realmente nada que vaya a asombrar a alguien que ha jugado antes. Sin embargo, destaca que incluye una enorme cantidad de trasfondos (quizás muchas, y algunas podrían juntarse) y habilidades. Quedan fuera las ventajas y desventajas, también para el suplemento en desarrollo (aunque algunas son nombradas en uno de los apéndices).
                El tratamiento de la magia es interesante. En su mayor parte, toma la base de Segunda Edición, con sus mismas dificultades y niveles de magia. Algunas cosas son mejor explicadas. Creo que de las secciones, en cuanto a estructura, es la que más cambió, y de buena manera.
                En segunda edición, cada esfera tenía aproximadamente dos páginas explicando sus cinco niveles y los efectos que podía lograr, seguido de otras dos páginas de recetas, con los puntos necesarios en cada esfera y algo de historia de estas recetas. En la Edición Revisada, si no me equivoco, se mantenían las primeras dos páginas, pero había un listado enorme de recetas, supongo que pensando en simplificar la cosa para los jugadores.
                En esta edición, los niveles de cada esfera están explicados rápidamente en una página, más o menos, y se evita las recetas. Lo que hay es un gran listado (y solo listado) de los efectos más comunes que los jugadores pueden necesitar, y como lograrlos. Nada de historia de las recetas, o relleno. No acá. Más adelante hay algo de práctica de las diferentes facciones y se mencionan algunas recetas y tesoros (talismanes y fetiches en otras ediciones) o dispositivos. Creo que esto cumple con simplificar, pero a la vez no tratar a los jugadores como tontos. En Mago la idea no es usar "conjuros" con componentes o pases mágicos específicos, sino que con paradigmas. El evitar las recetas es una buena opción para mostrar eso. En todo caso, para los que prefieren la regla escrita, ya se publicó el primer suplemento de la edición de aniversario, “How do you do that?”, enfocado específicamente en cómo hacer ciertos efectos mágicos, agrupados por tipo, y con bastantes recetas. No es muy “entretenido” de leer (por ser puras reglas), pero es interesante.
                Después de la magia el libro trae un par de apéndices. Uno contiene antagonistas y otros personajes “genéricos” que podrían aparecer en una crónica, y se incluyen como es costumbre estadísticas y sugerencias de interpretación. El segundo tiene (como comenté arriba) algunos méritos y defectos y ciertos artefactos mágicos. Ninguno de los dos apéndices ex exhaustivo en su cobertura (por limitaciones de espacio, y el “desborde” irá a parar a uno o más de los suplementos financiados por el Kickstarter), pero entrega lo suficiente para tener ejemplos y material básico para defenderse en una historia y dar la idea para crear los propios.
                Lo último son los agradecimientos propios de una edición de aniversario, el listado de patrocinadores del Kickstarter por categoría (que entiendo no viene en la versión Print on Demand para no hacer aún más grande un libro que aparentemente ya tiene problemas manteniéndose unido)  y un muy completo índice de términos. Recuerdo haber usado el de Segunda Edición alguna vez, sin muy buen resultado. Esta vez no es así, es realmente un buen índice.
                
                Edición Quintaesencia
                Al comienzo dije que la reseña la hacía sin ver el libro final. Bien, entre que escribí eso y ahora que lo reviso para publicarlo pasó bastante agua bajo el puente, y ya llegó mi libro. Es la edición Quintaesencia, la más alta de la gama que ofrecían en el Kickstarter. Las principales diferencias con la edición Deluxe “normal” es que la tapa de imitación cuero es morada en vez de negra, que está estampada con letras doradas (la otra solo tiene el nombre y símbolo de Cardinal en bajo relieve), que el borde de las hojas es dorado, y que tiene en la cubierta la carta de tarot clásica del juego (el Mago, con Dante como protagonista) en una versión que aparece en tres estados dependiendo de desde dónde se le mire: normal, quemándose y quemada. Esto último de algún modo ejemplifica las tres ediciones anteriores del juego.
                Tanto la versión Quintaesencia como la Deluxe fueron impresas y empastadas con medios tradicionales, y no se consiguen por fuera del Kickstarter, salvo a través de las tiendas que lo apoyaron para comprar varios y vender, o los revendedores. Eso significa que está significativamente más caro que lo que se conseguía por el Kickstarter. La versión que sí se puede comprar es la Print on Demand que está a la venta en DriveThruRPG.com, en dos opciónes: Standard y Premium. No he visto ninguna, pero los comentarios que han hecho en general es que la Standard no resalta mucho en colores y el papel es bien delgado, pero sirve como edición de “uso diario” para la mesa, mientras que la otra sí tiene mejor calidad, papel más grueso y es más bonita, pero que eso también la hace más pesada y algunos se han quejado de que el lomo del libro no aguanta. La Premium cuesta casi el doble que la otra.
                Respecto a la edición que tengo, puedo decir que es hermosa. Es aproximadamente el doble de ancho que segunda edición, pero no se siente tan pesada como esperaba que fuese. Claro que no es un libro para acarrear mucho, ni muy cómodo para leer en la cama (menos mal que existen los ebooks ahora). La textura del “cuero” es deliciosa, y el estampado dorado se ve muy bien. Parece, además, ser más duradero que el que traía Mago Segunda Edición, pero solo el tiempo lo dirá. La carta se ve bastante bien, y la tecnología usada ha avanzado harto desde las clásicas reglas esas con los transfermers que cambiaban entre auto y robot.
                La impresión adentro es bonita y con colores vibrantes, y el papel es de buena calidad sin ser couche ni muy grueso. Esta edición viene también con la pantalla del narrador, de tres paneles y con una bonita ilustración que tiene a todos los personajes de las tradiciones. Aunque es hermosa, de alguna manera va un poco en contra del resto del libro que permite jugar con todas las facciones. Digamos que si quiero narrar una crónica centrada en la Tecnocracia, la pantalla no pega mucho. Aparte de eso, viene con tablas útiles, es dura, pero liviana, así que termina siendo muy cómoda.

Con el juego de mesa A Study in Emerald para comparación del grosor.




martes, noviembre 12, 2013

Un gran descubrimiento: Terry Moore

Muchas veces se puede descubrir una buena obra a través de una recomendación en algún sitio, una reseña, o el comentario de algún conocido. Menos son las veces en las que no sólo se descubre un buen trabajo, sino también al gran autor que se encuentra detrás y que se deja traslucir en su obra.
Por una lista de Halloween llegué a Rachel Rising, un comic de horror de Terry Moore. Es difícil contar mucho sin entrar en spoilers, pero en principio trata de una joven que despierta enterrada, logra salir, y empieza a buscar respuestas de por qué terminó ahí, y por qué está viva (o no).
Hay bastantes más cosas pasando en el proceso, dándole sabor a la historia, incluyendo demonios, posesiones y brujas, pero lo mejor es descubrirlas al leerlas.

La historia no va a cambiar el mundo de los comics, ni es la mejor de horror que existe. Sin embargo, es un producto completo, bien hecho, que atrapa y satisface al máximo. En términos de películas de superhéroes, podríamos decir que no es un “Caballero Oscuro”, pero definitivamente es un “Avengers” (tomando en consideración que hablo de concepto de entretenimiento y no de temáticas, por supuesto). El dibujo en blanco y negro es realista, limpio, claro y pulido. Los diálogos son inteligentes, ocurrentes y divertidos. Los personajes interesantes y completos. La historia entretenida y horrífica. Sin embargo, dónde deslumbra es en la narración gráfica como un todo.
Rachel Rising es un comic que cuesta soltar una vez que se comienza a leer. Uno siente una compulsión por avanzar, por girar la página, la que aumenta al terminar un número. El flujo del texto y los dibujos es natural y trepidante, del modo que sólo un gran profesional puede hacerlo. Para qué hablar del gran uso de los “trucos” del medio, como los Cliff hangers al final de cada número. A pesar que creo que está muy bien en este medio, me cuesta entender por qué no están haciendo una serie de televisión basada en este comic en este momento. Si tuviera la habilidad y la plata, ¡yo la estaría haciendo! El tipo sabe contar una historia…
Es por eso que no me quedé contento con devorarme los 20 números que hay hasta ahora (y morderme las uñas mientras espero el resto) y decidí leer su serie anterior, Echo. Esta vez el terreno no es el horror, sino la ciencia ficción. Una mujer tiene la mala suerte de estar en el lugar equivocado, en el momento equivocado, y recibir en su cuerpo los restos de un traje de pruebas en prototipo que explota en medio del desierto. Esto provoca inmediatamente dos cosas: se vuelve una mujer buscada por los militares, y el traje comienza a actuar de maneras extrañas, con diversas consecuencias.
Son 30 números bien intensos que, tal como Rachel Rising, cuesta dejar de lado. Creo que en estas dos ya se puede ver la evolución narrativa, siendo la más nueva mejor en ese aspecto, pero no por eso la anterior quedando muy atrás. Entiendo, de hecho, que había planeada una película de Echo, pero no sé qué habrá pasado con eso.
No me quedé ahí. Ahora comencé a leer la primera serie del autor, la que conocía de nombre pero nunca me animé a leer: Strangers in Paradise. En el dibujo se notan los años de oficio, ya que en esta se ven menos pulidos, pero ya se puede notar la habilidad narrativa. Sólo llevo un número, pero ya puedo ver que es algo muy distinto, una seria más realista y aterrizada, de relaciones humanas. Entiendo que se llevó varios premios por esta serie, así que mala no debe ser.
En lo que he leído, puedo notar varios puntos comunes: los protagonistas son mujeres, pero no necesariamente mujeres fuertes (aunque sí las hay en la historia, acompañando), y normalmente hay personajes y situaciones lésbicas, retratadas de manera muy normal y como parte del día a día. Al ver tanta predilección por el lado femenino pensé que podría ser una autora, pero no, es un hombre, lo que creo que lo hace hasta más valioso.
En fin, sólo quería pasar el dato, si quieren leer algo bueno, tomen alguna creación propia* de Terry Moore. No se van a arrepentir. Yo, por mi parte, seguiré esperando el próximo número de su serie actual, que la hagan serie de televisión, y leeré el resto de las cosas que publique.
Por cierto, las tres series que comenté están en español, editados por Norma, así que el idioma no debería ser problema para nadie.


* recalco esto porque también ha escrito o dibujado un par de cosas para las grandes editoriales, las cuales no he leído y puede que también sean entretenidas, pero es muy distinto trabajar con creaciones propias sobre las que se tiene pleno control, que con productos ajenos.

PS: No tienen que tomar mi palabra. Pueden buscar distintas reseñas en la red, y probablemente no vean más que alabanzas.

lunes, noviembre 11, 2013

Homeland en la senda de Prison Break

Disfruto de Homeland, aunque no soy de los que creen que es magnífica, impresionante, increíble y que está bien que se llevara todos los premios. Es entretenida, bien hecha, y ya. Sin embargo, siento que se apoya más en “trucos” de guión y narrativa (siempre efectivos, y lo que no está mal per se) que en una historia sólida. Parte del juego es el engaño del espectador, y para lograrlo tienen que llegar, muchas veces, a los límites de la credibilidad.
En todo caso, no era eso lo que quería comentar, eso es más bien un disclaimer. El punto de la entrada es que creo que Homeland está siguiendo el mismo camino que Prison Break, lo que no es particularmente buen. Veamos por qué pienso esto:
Ambas series comenzaron con una temporada muy fuerte, con un conflicto específico que está destinado a solucionarse (positiva o negativamente) en un plazo corto, o de todos modos se perdería el interés del espectador. No se puede tener a los protagonistas eternamente tratando de salir de la cárcel porque los televidentes asumirían que se vuelve una meta inalcanzable, y no se puede tener a una audiencia cautivada con un ataque terrorista si nunca pasa.
Ambas terminaron su primera temporada de un modo que cambiaba el juego radicalmente: en Prison Break los protagonistas escapaban, en Homeland el terrorista decide no realizar el ataque, pero volverse un político que ayuda al otro bando, mientras que la investigadora queda totalmente desacreditada. Sin embargo, ambos tenían continuaciones lógicas, aunque diferentes a su planteamiento original. Prison Break continuó (de buena manera) con la persecución de los fugitivos, y Homeland con un terrorista descubierto funcionando como una especie de doble agente para salvar su trasero.
Las dos llegaron al final de la segunda temporada a un punto en el que había un final natural, que cerraba bastante bien todo y dejaba satisfecho, para borrarlo en los últimos 2 minutos con un acto imprevisto, súbito y hasta ridículo, que hace que la tercera temporada tenga que ser muy distinta.
En Prison Break lo que hicieron fue repetir la primera temporada, pero con los personajes cambiados. Los capítulos seguían siendo entretenidos, pero claramente ya no era lo mismo de antes, ni causaba el mismo impacto. En Homeland se enfocaron en otro caso de la CIA, y han dejado prácticamente de lado a Brody (ha aparecido sólo en 2 capítulos, en una situación totalmente ajena a la central, lo que no parece que se vaya a conectar, y si lo hace será forzado. Por cierto, es el hombre más buscado, pero nadie parece realmente estar buscándolo). Han tratado de mantener a la familia de Brody en la trama, pero realmente no importa que pase con ellos, no interesa su drama familiar, y (más allá del forzado encuentro entre la ex de Brody y Carrie) no hay ninguna relación con el resto.
Prison Break solucionó su tema asumiéndose como otra serie, y se adaptó a algo que era como los magníficos en su cuarta y última temporada. No tenía nada que ver con la original, pero fue divertida y terminaron de cerrar todo, de una u otra manera. No sé qué hará Homeland. Tiene la ventaja de temporadas más cortas, así que podría arreglárselas mejor, en teoría. Quizás exculpen a Brody y lo vuelvan un doble agente, o (que sería lo mejor, narrativamente hablando) simplemente decidan darle un término a la serie con algo digno, cerrando el arco argumental del prisionero de guerra. Ahora, lo que yo creo que va a pasar en el corto plazo es que Brody va a volver, y se ve a poner en contacto con su hija, para no dejarla fuera del show (aunque no le veo mucho sentido).

La serie la estoy viendo, en este momento, por inercia y por Mandy Patinkin, pero cada vez queda menos, y no sé si dure más allá de esta temporada. Lo que está bien, así me quedo con tiempo para otras cosas.

¿Seguros que voy acá? Porque en la serie ya ni aparezco...


lunes, julio 22, 2013

Dexter, Temporada 8, Capítulo 3 – What's eating Dexter Morgan?

Tercer capítulo y parece que ya se aclara un poco la película de hacia donde pretende llevarnos la serie en la temporada final.
Siento que no hay mucho que decir de este capítulo, y por eso me costó animarme a hacer la reseña. Más vale tarde que nunca, y la hago ahora, antes de ver el nuevo capítulo, para que no me vaya a influenciar.
Primero, debo decir que aparentemente (a menos que después se saquen los pillos de una manera muy fea) la doctora Vogel no es la culpable intelectual de los asesinatos, cosa que yo pensaba tenía hartas probabilidades de ocurrir. Parece que sólo está obsesionada con Dexter y ya, aunque claramente va a tener un rol importante como “mala” al tratar de persuadir a Dexter de que se deshaga de Deb…
Eso nos lleva al asunto central, al parecer, de la temporada: ¿qué va a hacer Dexter con Debra? Cuando ella fue a la policía, pensé que iba a confesar haber matado al asesino a sueldo, no a Laguerta. Me pilló por sorpresa, porque andaba volando bajo.
Quizás fue más sorprendente como Dexter decidió lidiar con eso, sedándola y llevándosela. ¿Cómo escalará? ¿Se pondrán directamente en contra? ¿Pasará por la mente de Dexter matarla? Si lo desarrollan bien, creo que va a resultar interesante.
¿Qué más pasó? Poco. Los secundarios no avanzaron, Quinn sigue tratando de contener a Debra y “ayudándola” a través de Dexter, a pesar que algunos años atrás sospechó de él, y parece que se olvidó. Quizás lo más llamativo es el tiempo al aire que está teniendo el jefe de Debra. Algo extraño tiene, hay un secreto ahí, y no creo que sea sólo que quiere tirarse a Deb. ¿Será él el asesino? Creo que eso sería solo como factor “wow” y para ahorrarse personajes, porque no le veo mucho sentido.
Y eso es todo por esta semana. La verdad es que no pasó mucho. Hoy veo el otro, y les cuento que tal.

¿No te interesa posar como ella para un par de fotos?


martes, julio 09, 2013

Dexter, Temporada 8, Capítulo 2 – Every Silver Lining

Está extraña esta temporada, debo admitirlo. Me estoy enganchando con la historia, parece interesante, al parecer veremos una nueva faceta de Dexter. Lo vemos nuevamente con un gran problema personal, el de cómo lidiar con Debra, y el que parece ser un digno rival en el aspecto de los asesinatos.
Además, nos encontramos con un buen personaje secundario para la temporada, la “co-autora” del código de Harry y que aparentemente tiene una manera de meterse en la mente de Dexter. Claramente, las cosas no van a ser tan simples como aparentan, y no sería de extrañar que esta señora sea realmente la asesina, que está manipulando a sus pacientes para matar. Si no, ¿por qué tanto cuidado en no mostrar al asesino, cuando normalmente en la serie eso no es oculto? Quizás estoy especulando demasiado…
Ahora bien, los puntos buenos son que la historia está entretenida, tengo ganas de saber cuál es el motivo de este asesino para abrirles la cabeza de esa forma, y para no hacerlo directamente él (o ella). También quiero saber que va pasar con Debra, y cómo lo va a manejar Dexter. Parece que va muy en picada, y su hermano no la va a dejar botada. Mal que mal, ella y Harrison son lo único que le queda, y ella es como la única opción de que Harry crezca “normal”. A todo esto, ¿Qué fue de Harrison este capítulo?
Debo decir, en todo caso, que no me compro eso de que Debra matara al tipo. Creo que habrá algo más ahí. Si no, ¿por qué no lo mostraron directamente? ¿De dónde sacó la otra arma? Por lo mismo, me parece bien estúpido que mintiera y no dijera que el tipo le había sacado la cresta, y que no dijera que ella llamó a la policía. ¡La llamada está grabada! Deberían poder detectarla y pillar que está mintiendo.
Eso me lleva al mismo problema de la semana pasada. Puede que la historia vaya bien, pero se nota que los escritores no son los mismos, y son más malos. Están esos descuidos, y la necesidad de exponer todo para que cuadre con las necesidades de la historia. Como ejemplo, el interrogatorio de Debra, en la sala de interrogación, en la que Quinn le explica por qué está ahí y no simplemente en la cafetería. Es decir, le responde al espectador la duda que surge de la “conveniencia” que Dexter pueda ver y escuchar sin que lo vean.  Creo que lo pueden hacer mejor.
Y sigue el hecho que no han explicado el por qué volvió el capitán retirado. Dudo que sea política de la policía el reinstituir gente cuando se mueren otros…
Volviendo a lo positivo, otra cosa que me ha gustado es que, aparentemente, los personajes secundarios “de siempre” no van a tener gran relevancia. No es que me desagraden, pero prefiero que no participen, a que tengan malos arcos argumentales, como en las temporadas pasadas. Ahora, al parecer, se van a quedar como incidentales, con detallitos y nada más. Ojalá. Probablemente les den su final feliz (Batista de jefe, Quinn creciendo, Masuka… igual), pero nada más.

Eso es por esta semana. A esperar cómo se desarrolla. Aún nada despampanante, pero como estaba con las expectativas bajas, creo que me he entretenido bastante, y pinta mejor de lo que esperaba. Mientras no sean muy obvios, creo que puede resultar una buena temporada final.

¿Por qué será que yo encuentro todas las pistas, y los detectives ninguna?

martes, julio 02, 2013

Dexter, Temporada 8, Capítulo 1 – A Beautiful Day

Acaba de comenzar una nueva temporada de Dexter, la que, en teoría, será la última. A pesar de que el entusiasmo es más bien tibio, decidí terminar lo que empecé el año pasado, y reseñar también estos episodios.
El comienzo de esta temporada me dejó con un sabor medio amargo. No tanto por la historia, que puede ser entretenida, sino porque se nota desprolijo. Voy a hacer un poco de historia del detrás de las cámaras de Dexter, antes de hablar de este episodio, para que entiendan a dónde voy.
La serie comenzó con 3 productores ejecutivos que eran el alma de la serie (porque creo que el cerebro original deberíamos atribuírselo al autor de la novela, y a los escritores, ¿no?). Al final de la cuarta temporada, no quedaba ninguno de ellos en la serie, porque, por distintas razones, optaron por dejar el show para hacer otras cosas, personales o profesionales.
Para la quinta temporada trajeron a un ex productor de “24”, que era un buen show, pero, en mi opinión, algo totalmente distinto a Dexter. El resultado fue irregular, pero logró mantener parte del espíritu y terminar la temporada muy bien, en lo que yo he llegado a abrazar como lo que debió haber sido el final de la serie. De hecho, creo que la primera reseña de Dexter que escribí fue sobre el episodio final de la temporada, alabando precisamente lo bien escrito que estaba, y por qué, a pesar de los altibajos, Dexter era una de las mejores series de la televisión.
Sin embargo, dicho productor también dejó la serie, esta vez participando sólo en una temporada, por lo que para las 3 últimas hubo un nuevo productor, o showrunner. Era uno de los escritores de la serie hasta entonces, por lo que todo debería salir bien, ¿cierto? Bien, pues en mi opinión no ha sido así.
Desde la sexta temporada la escritura se ha vuelto burda, simplista, y nos han cambiado al Dexter que conocíamos. No, no es una evolución natural o crecimiento, como en las primeras temporadas, es un cambio. Y no sólo pasa con Dexter, sino que con otros personajes también, y con la serie misma. Ya no vemos el meticuloso proceso de Dexter para atrapar a criminales menores y asegurarse que son merecedores de su mesa, ya no vemos cuestionamientos fundamentales a la hora de pensar en matar (o decididamente hacerlo) a alguien que podría no cumplir con el Código de Harry.
Los personajes secundarios han perdido todo su brillo, y no son más que una comparsa. Quinn, de haber sido un peligro para Dexter, se volvió en mal policía que pasa borracho y tirando, porque sí. Batista ha pasado de una mala línea argumental a otra, muchas veces contrapuestas (que enamorado de una policía, que casado con Laguerta, que divorciado, que retirado, que de vuelta), sólo para no tener que sacarlo del programa.
Nos han dado promesas de personajes e historias que no se han cumplido (el practicante/psicópata de las temporadas 6 y 7, que tuvo 0 relevancia), nos han puesto a Dexter contra la mafia y no un asesino, nos han metido puntos de giro dificilísimos de tragar (Debra enamorada de Dexter), han resuelto otras de un plumaso, etc.
En fin, nos han cambiado el programa. Y aun así, varios seguimos viéndolo, esperando que el final esté a la altura.
¿Qué hay entonces de este episodio? Mucho de lo que hemos visto en las últimas 2 temporadas.
Tenemos a un Batista que volvió a las fuerzas policiales sólo para no desaparecer, a pesar que toda su trama de la temporada pasada era su retiro. Para colmo de males, en un alarde de mala escritura de historias, nos ponen al mismo Batista explicándoles a sus amigos que deben tenerlo muy claro (ergo, explicándonos a nosotros), que lo hizo porque la muerte de Laguerta le hizo querer volver. Sin embargo, no le dio tanta motivación como para investigar por qué la pistola con la que le dispararon fue una de servicio, de Debra, ni para revisar si en sus papeles había algo que se podría haber pasado por alto.
Quinn, por su parte, en su eterno rol de 0 aporte, ahora se está tirando a la hermana de Batista, la que, por alguna extraña razón, ahora se siente atraída por un tipo bastante inútil, con fama de mujeriego, y bastantes años mayor que ella. Y claro, a pesar de ya no ser una quinceañera, sigue siendo la niñera. Dexter debe pagar muy bien, lo que me hace pensar que la policía de Miami debe pagarle muy bien a sus empleados, incluso a los del laboratorio. Claro, esa relación de seguro va a causar conflictos, el motor de toda historia, pero conflictos vacíos, y que claramente no nos importan.
¿Qué hay de los principales, los que realmente cuentan? Eso pinta un poco mejor. Por fin Debra tiene la reacción que debió haber tenido la temporada pasada, pero aún sigue cubriéndole las espaldas al hermano por nuevos desastres. Dexter parece haber vuelto a ser el de antes, sin embargo hay cosas que se notan son culpa de la nueva “administración de la serie”.
Me pareció excelente la referencia al club de bolos, pero ¿qué es eso de Dexter tirando con minas irrelevantes? Dexter tenía problemas con el sexo, no le interesaba. Logró superarlos cuando empezó a importarle una persona, dañada como él, y hasta la temporada 5, sólo con personas dañadas había podido estar, siempre con “sentimientos” involucrados. Ahora resulta que nos muestra que todo vuelve a la normalidad, porque se tira a una mina X (sólo para mostrar tetas en el primer capítulo, como ha sido la tónica de la serie). ¿Qué normalidad es esa? Ciertamente no la normalidad de Dexter. Eso es lo que molesta. Además de una voz en off que se vuelve explicativa y no una entrada al cerebro del asesino.
Por otro lado, nos presentan a quién sería el antagonista de la serie (y no necesariamente el malo), una psiquiatra/neuróloga/criminalista/lo-que-sea que sabe el secreto de Dexter por obra y gracia de Dios. Supongo que más adelante explicarán que de hecho ella asesoró a Harry y le recomendó entrenar a Dexter, sin embargo eso no explica por qué no apareció antes, cuando se había descubierto al Bay Harbour Butcher…
Hay un par de cosas más, que salieron en la promo del próximo capítulo, pero voy a esperar a la próxima semana a que se materialicen para comentarlas con propiedad, y no adelantarme.

¿Qué podemos esperar, entonces? Creo que no mucho. El asesino que les saca la cabeza parece interesante, pero considerando las últimas temporadas, no me extrañaría que se diluya en nada. Lo más sensato sería bajar bastante las expectativas y rogar que estemos equivocados y nos sorprendan, y que ojalá la serie termine con dignidad. Acabar de buena manera, siento, es pedirle más de lo que puede lograr en este momento. 

- No sé que estamos haciendo todavía acá.
- No hagas preguntas y cobra el cheque.

martes, enero 08, 2013

Dexter: Episodio 12 de la Séptima Temporada: Surprise Motherfucker!


Bueno, por fin me decido a hacerlo. No sé si esperé tanto para digerirlo y analizarlo mejor, o para que se me olvidase un poco.
El final de la temporada fue una mezcla de los anteriores: no fue completamente abierto como la temporada pasada (a pesar de tener ya asegurada la próxima y, en teoría, última), pero tampoco deja todo en el statu quo de otros años. El peligro inminente de la incansable Laguerta se acabó, pero eso debería levantar nuevas investigaciones.
Inteligentemente, no mostraron que hicieron con el cuerpo, para darse todo el tiempo entre temporadas de armar la línea argumental que quieran. Si deciden que Dexter y Debra la escondieron a la perfección y jamás nadie sabrá de ella, olvidándose para siempre de ese problema, podrían hacerlo. Si quieren hacer que simplemente la dejaran tirada, o que fueran descuidados, o lo que se les ocurra, pueden hacerlo.
Sobre el episodio mismo, tenemos esos flashbacks que me parecieron que iban a ser interesantes, y terminaron siendo nada más que relleno. Una pena, Doakes se merecía algo mejor en esa aparición. No le vi mucho sentido, y menos que el capítulo tomara su nombre de ellos.
Lo de Quinn fue vergonzoso, toda su trama del año no fue más que relleno de la peor clase, con una pésima conclusión. De Masuka y Batista ni hablar, ellos sí que sólo cobraron porque no sabían cómo justificar el sacarlos, porque no tuvieron ninguna relevancia.
Lo de Hannah tampoco fue bien resuelto. Decidió no hablar porque sí. La única explicación que se le podría dar ahora es que, como Dexter, prefiera callar para tomar venganza por sus propias manos. ¿Honor entre asesinos? No, Dexter acababa de traicionar eso…
Bien, sobre la trama principal, o más bien la que iba quedando (habiéndose acabado la del ruso hace ya un buen rato), Dexter decidió ensuciarse las manos (como no hizo con Doakes) y matar a alguien completamente inocente, inculpándola además de otro asesinato. Supongo que no quedaba otra, luego de esa inesperada y tardía evidencia contra Debra (que debo decir molesta bastante, porque se siente plantada por los escritores. Podrían haberlo resuelto de una mejor manera). Cuando Laguerta parecía vencida, BAM, nueva evidencia circunstancial.
Ya habiéndose apartado del código, ¿qué importa una más? Todo listo, no hay problemas, el plan parece sensato luego de lo mal que había quedado Laguerta frente a todos, y aparece Debra. En una reacción totalmente estúpida, sin sentido y alejada de su personaje, le dispara a Laguerta en vez de dejar que Dexter haga lo que sabe hacer. Supongo que al menos sirve para darnos algo de novedad en la próxima temporada…
¿Qué queda entonces para el show? Puede pasar cualquier cosa, pero a esta altura, se ve poco probable un final “feliz”, al menos de acuerdo al tono del show, que se ha preocupado de “castigar” a los malos de verdad. Comparándolo con Breaking Bad, estaba bien que Walter terminara bien cuando era un bueno lidiando con los malos por una causa mayor, y sólo dañando a tipos repudiables (como Dexter, a menor escala), pero cuando él ya pierde el control y se convierte en uno de los malos, no puede terminar bien. Al menos, no puede volver al statu quo de antes.
Opciones, las tienen todas. No sería raro ver a Dexter y Debra como fugitivos, terminando románticamente involucrados. Tampoco a Debra muerta, o incluso Debra matando a Dexter. Creo que por ser televisión gringa, no van a querer matar a Dexter, y lo van a preferir libre, para que puedan hacer otras temporadas o revival si lo desean… A Debra no le veo mayores posibilidades de sobrevivencia, especialmente porque ella no va a aceptar lo que hizo, y porque Hannah está dando vueltas (si es que deciden usar eso).
La temporada me dejó un sabor amargo. Fue entretenida, pero no estuvo a la altura de las circunstancias. Que Debra descubriera a Dexter debió representar un cambio brutal en la serie, y no siento que haya sido así. Fue más tema el que se enamorara de una asesina. Dejaron botadas líneas que prometían, y se decicieron de algo que habían plantado la temporada anterior, el practicante con tendencias asesinas… Eso es casi imperdonable.
Sólo queda esperar que la próxima si pague, que sea la última y se vaya de buena manera. Si se les ocurre estirar más el chicle, creo que, a pesar de lo mucho que me gustó la serie, voy a terminar abandonándola como Criminal Minds. Ah, y algo que me gustaría ver sería que Harry también se le aparezca a Debra.
Eso es todo por esta temporada, veremos si me animo a reseñar alguna otra cosa que vea. Probablemente voy a dedicarme a ponerme al día con series antiguas (o no temporadas actuales la menos), como Damages (y haré una reseña de toda la serie cuando termine) y The Wire. También tengo en lista de espera series o mini series inglesas, y trataré de seguir con reseñas de eso. Gracias a los que siguieron, y disculpen la poca regularidad.

Es muy sospechoso que aparezca acá, cuando no tiene ninguna relevancia con la trama...