martes, noviembre 04, 2008

Leavings and Partings

El fin de semana terminé de escuchar The Graveyard Book, de Neil Gaiman. Esta vez totalmente legal, gracias a la generosidad, buena onda y, por que no decirlo, vision del autor que decidió (junto con la editorial, no le restemos méritos) colocar en línea todo el libro. Lo que hizo fue un tour por 9 ciudades, y en cada una leyó un capítulo distinto, y todo eso está puesto on line (son solo 8 capítulos, pero el 7 lo dividió en dos partes).
Este mensaje tiene algo de spoilers (nada grave, en todo caso), así que si no quieren saber nada del libro, no lean.
En resumidas cuentas, trata de un niño que queda huérfano y es criado en un cementerio por unos fantasmas y tiene un guardián, Silas, que tiene la "gracia" de poder salir del cementerio y por ende conseguirle comida al cabro. El nombre (y quizás hasta el libro entero) es un homenaje al Libro de la Selva. De hecho la aceptación del niño sigue de cerca la aceptación de Mowgli, y el capítulo de los Gouhls claramente se basa en el capítulo del Libro de la Selva en la que lo monos raptan a Mowgli (sí, antes de este libro escuché el de Kipling para no perderme de nada). Quizás la gran diferencia es que el de Gaiman está completamente entrelazado, mientras que el de Kipling son sólo historias sueltas, siendo solo las primeras las que uno asocia al libro (gracias a la película de Disney).
Bueno, el tema es que el libro termina como uno sabe que va a terminar desde que comienza a leerlo, pero que tiene la esperanza no sea así: Bud (diminutivo de Nobody, el nombre del protagonista) crece y tiene que dejar el cementerio porque ya no es capaz ni siquiera de ver a sus padres. Narnia all over again... Incluso más, al final le pregunta a Silas si puede volver en el futuro, pero el mismo se responde "Sí, quizás puedo volver, pero ya no será mi hogar".
¿Es eso algo inevitable? ¿Es que todos tenemos que "crecer" y dejar lo que era nuestro hogar? ¿Qué pasa con "home is where your heart is"? ¿O eso también es algo pasajero? ¿Se encuentra alguna vez un hogar definitivo? En Narnia tuvieron que morir para alcanzarlo, y no podría decir que es algo muy tentador (dado que nada te asegura Narnia).
No sé, me dejó medio pensando ese tema, el saber que uno no puede acomodarse, porque al final va a tener que dejar ese "hogar". Es molesto, al menos para mí, que me cuesta generar los lazos para sentirme "en casa".

Ya, ahora una canción de The Magnetic Fields, por si creyeron que todo esto fue solo una pérdida de tiempo. Ah, a todo esto, no sé si lo dije, pero el libro es super bueno, lo recomiendo.

2 comentarios:

Æmilio dijo...

Rodolfo:

Más que irse del hogar, significa el avanzar, por mucho que uno se quiera quedar en ciertos puntos de la vida, uno está obligado a seguir caminando para cerrar el ciclo.

Siguiendo con la analogía de Mowgli, él se va porque ya no tiene cabida en la selva como un lobo, era el momento que aceptara su condición de Hombre y se fuera a vivir con ellos.

Así que no seas un pegadito y camina a lo nuevo, recuerda de donde vienes porque a ese lugar no volverás.

Rodolfo dijo...

Ah, pero el asunto es que no se van por iniciativa propia. Aceptan que es lo que deben hacer, pero sólo una vez que se ven obligados a hacerlo porque son expulsados. O sea, está bien quejarse un poco (y tanto Mowgli como Bod lo hicieron). Es más, ahora que recuerdo, a Mowgli después lo expulsan de la aldea porque creen que es un brujo y vuelve a la selva.